¿Qué retos enfrenta el ecommerce en América Latina tras la pandemia del Covid 19?

¿Qué retos enfrenta el ecommerce en América Latina tras la pandemia del Covid 19? A pesar de que los números de contagios y fallecidos por la pandemia del coronavirus siguen siendo muy elevados en toda Latinoamérica, la evolución a futuro señala que será posible un control de la misma a medida que avancen los meses. No cabe duda de que el coronavirus ha obligado a cambios de mucho impacto en el día a día de todos los ciudadanos. A su vez, desde hace aproximadamente un año se han introducido dinámicas de consumo que nada tienen que ver con las que se venía produciendo hasta los meses centrales de 2020. Las ограничения мобильности y los заключения provocaron que la gente dejara de comprar los mismos productos de antes o que, si continuó haciéndolo, se decantara por la vía electrónica de consumo, la única posible en muchos casos y la más segura para evitar el contagio. Retos a nivel logístico tras la explosión del ecommerce Santiago Navarro, presidente para América Latina de la plataforma de comercio colaborativo VTEX, señala que el comercio electrónico ha pasado en pocos meses de meses de ser poco más que una moda a algo vital para cualquier economía. En algunas empresas la proporción de ventas online pasó del 5% al 80% en cuestión de semanas, lo que obligó a esas organizaciones a enfrentar importantes cambios a nivel logístico. Sergio Pérez, director ejecutivo de cuentas corporativas en América Latina de la consultora Newmark, ofrece un dato interesante, uno de cada tres productos que se vende a través del comercio electrónico se devuelve. Esto es importante a nivel económico porque algunos de esos productos no tienen valor de recuperación y porque muchas empresas se han visto obligadas a reforzar mucho su sistema logístico, para hacer frente a la alta demanda. El futuro dentro del sector logístico pasa por desarrollar espacios de almacenaje que ofrezcan un alto nivel de eficiencia en el combo calidad-tiempo-respuesta, y que todo esto vaya de la mano de ahorro en los costes y buen servicio de atención al cliente. Los establecimientos físicos como espacios de transacciones Navarro no confía en que el amplio crecimiento del ecommerce vaya a hacer desparecer el comercio físico, pero sí incide en la idea de transformar estos espacios en lugares de alto valor agregado. Así, las tiendas pueden combinar el comercio electrónico con el comercio físico y que sus instalaciones sirvan como punto de apoyo, de recepción de clientes y como lugar para experimentar un mayor grado de compromiso entre consumidores y el propio establecimiento. A su vez, este crecimiento del comercio electrónico tampoco ha de suponer, de manera obligada, la pérdida de los pequeños establecimientos. Los pequeños retailers pueden encontrar en la combinación entre ecommerce y tiendas físicas ese escenario al que no llegan grandes monopolios como Amazon y Mercado Libre. Es imposible competir en ventas o facturación con gigantes como Ebay, pero este no siempre tiene la oportunidad de disponer de puntos de entregaa poca distancia de los clientes, como sí puede tener un pequeño retailer bien asentado en el territorio. El desafío de llegar a los clientes, y que los clientes lleguen hasta las tiendas online Más allá de los problemas de logística y almacenaje, otra cuestión relevante es la de las propias empresas para adaptarse a esta nueva realidad tan digitalizada y globalizada. Miles de empresas han tenido que iniciar un proceso de reconversión que estaban aparcando durante años. A pesar de que el ecommerce crecía de manera progresiva hasta la llegada del Covid 19, fue la pandemia lo que lo catapultó como un canal de ventas realmente importante. Muchas empresas han tenido que ponerse manos a la obra y acudir a Servicios ecommerce que les permitan resultar atractivos frente a los clientes. Si toda la competencia está en internet, hay que buscar fórmulas que atraigan a los clientes. Por otra parte, sigue estando muy presente el asunto de la brecha digital, pues todavía decenas de millones de personas en la región no tienen un acceso económico, seguro y de calidad a internet, lo que resta en gran medida las posibilidades de desarrollo de esa comunidad. En esa tesitura, los retos que enfrenta el comercio electrónico son muy variados pero apasionantes. Solo hay una certeza clara, el ecommerce ha venido para quedarse.