El FBI ha afirmado que la inteligencia iraní fue responsable de una serie de correos electrónicos amenazantes enviados a votantes demócratas en el estado de Florida. Los correos electrónicos supuestamente contenían amenazas del grupo de derecha Proud Boys, pidiendo a los votantes que cambiaran su lealtad al Partido Republicano. John Ratcliffe, director de inteligencia nacional de la administración Trump, dijo que los correos electrónicos eran parte de la campaña de desinformación de Irán para incitar el malestar social y socavar la campaña de Trump para un segundo mandato. No se sabe cómo los correos electrónicos habrían logrado estos objetivos dado que llamaron a los votantes a apoyar a Trump, pero es posible que al fortalecer el vínculo entre el presidente y los extremistas de derecha, haya influido en el votantes. Irán rápidamente negó las acusaciones. "A diferencia de Estados Unidos, Irán no interfiere en las elecciones de otros países", dijo en un comunicado Alireza Miryousefi, portavoz de la misión iraní ante la ONU. "El mundo ha sido testigo de los desesperados intentos públicos de Estados Unidos de cuestionar el resultado de sus propias elecciones al más alto nivel. Estas acusaciones no son más que otro escenario para socavar la confianza de los votantes en la seguridad. Elecciones americanas y son absurdas ".