Con los avances en conectividad móvil, ahora podemos conectarnos a la mayoría de los dispositivos a través de nuestros teléfonos móviles. En el futuro, las posibilidades de ampliar la conexión más allá de las conexiones simples a los teléfonos móviles serán el motor de la conectividad. Con la tecnología de Internet de las cosas (IoT) y la inevitable introducción de la 5G, el ritmo de la tecnología está cambiando rápidamente y debemos comenzar a planificar ese futuro. La tecnología puede ayudar a alcanzar un nivel de vida nunca antes visto. Al utilizar los vehículos autónomos como un caso de estudio, podemos comenzar a comprender cómo las empresas pueden trabajar para tener un futuro más ético con la tecnología conectada y la introducción de 5G.
El futuro de la tecnología y las infraestructuras conectadas.
Las empresas están continuamente reevaluando sus estrategias y deben esforzarse por adaptarse a las nuevas tecnologías a medida que nuestro mundo se vuelve más conectado. Cuando pensamos en los dispositivos que utilizamos, actualmente tenemos conexiones básicas de dispositivo a dispositivo. En los próximos años, todo estará conectado: con la implementación de 5G, nuestras conexiones se multiplicarán. La vida cotidiana de las personas está ligada a las aplicaciones que se sincronizan con los electrodomésticos de su hogar, pero en todos los sectores, como la fabricación y la atención médica, las organizaciones también estarán más conectadas. En el diseño inicial de Internet, nadie fue capaz de predecir las enormes cantidades de datos que se crearían y los usos potenciales que estos datos podrían proporcionar a las empresas. Desde entonces hemos restablecido la seguridad y la regulación. Ahora podemos predecir mejor el futuro del desarrollo tecnológico. La mayoría de las tecnologías de IoT ahora están diseñadas teniendo en cuenta los datos, lo que ayuda a mejorar el diseño y la implementación. Por lo tanto, ahora podemos construir dispositivos conectados pensando en el usuario.Кредит изображения: Shutterstock (Изображение: © Shutterstock)
El caso de los vehículos autónomos.
La tecnología conectada de la que más se habla en el campo de la ética concierne a los vehículos autónomos. Este año, los líderes empresariales y los gobiernos están pidiendo un enfoque responsable de los automóviles autónomos. Parece que asegurarse de que las tecnologías conectadas sean tratadas de manera ética ya es una de las prioridades de este sector, pero aún queda mucho por hacer para que los estándares sean consistentes a nivel global. Como los autos autónomos se someten a pruebas y controles rigurosos por parte de los medios de comunicación, la comunidad internacional se compromete a crear un proceso de prueba avanzado que no solo refuerza las pautas de seguridad Pruebas que todos los fabricantes deben seguir, pero también garantiza la transparencia para que el público conozca las normas. Dichos estándares deberían ir más allá de los vehículos autónomos e impregnar las pautas éticas de la tecnología conectada. Los gobiernos de todo el mundo deben trabajar juntos para acordar y establecer estándares para que la industria de la tecnología pueda avanzar en una dirección acordada que también proteja la privacidad de los datos individuales al tiempo que protege la tecnología. La tecnología no es un obstáculo y, como todas las tecnologías digitales, los automóviles autónomos mejorarán nuestras vidas de una manera que no hemos podido entender antes. Los beneficios potenciales en términos de seguridad personal, impacto ambiental y sistemas de transporte más eficientes valen la pena una inversión considerable y debemos considerar los desafíos no como obstáculos sino como oportunidades para generar algunas de las ideas. El más innovador jamás visto por la industria.Кредит изображения: Shutterstock (Изображение: © Shutterstock)